Vivimos, en el momento actual, una era digital que hace que todo lo que habíamos conocido hasta hace 10 ó 15 años se haya transformado de un modo muy importante. Todos y todas nos hemos visto obligados a reinventarnos y a tener claro que teníamos que adaptar nuestros conocimientos a las nuevas exigencias y demandas de una sociedad que ya no tiene nada que ver con la que teníamos a principios del siglo XX. La informática y la tecnología, en efecto, se han encargado de transformar absolutamente todo.
Una de las cuestiones que ha cambiado la sociedad y el comercio de un modo que podríamos considerar radical ha sido la venta de todo tipo de artículos o servicios por Internet, el ecommerce que llamamos. Este elemento está siendo uno de los elementos definitorios de la realidad vigente, un medio que se está expandiendo y que cuenta con el beneplácito de prácticamente todas las empresas habidas y por haber. Un medio que, además, nos ha obligado a cambios en todas las estructuras empresariales existentes.
El ecommerce tiene un potencial del que prácticamente nadie puede dudar a estas alturas de la película. Así lo demuestra un artículo escrito en la página web de El Economista. La verdad es que existen muy pocos críticos que se manifiesten en contra de este tipo de comercio. Es más cómodo y más ágil que cualquiera de los comercios existentes y vigentes a día de hoy. A todo el mundo le beneficia tenerlo a mano y lo cierto es que ejerce una función social que es de una extrema utilidad.
La logística, la principal afectada por el cambio digital en las empresas
Es evidente que la llegada del ecommerce ha hecho que las estructuras de las empresas, tanto de las grandes como de las pequeñas, varíe al menos en parte. La logística ha sido el departamento que más afectado ha resultado debido al cambio que se ha originado en materia digital. Y es que las estructuras logísticas que son necesarias ahora con la llegada del ecommerce no tienen nada que ver a las que solían ser habituales en algún otro momento de la historia. Todo ha dado un giro de 180 grados.
Preguntemos por ejemplo a Amazon. La compañía de Jeff Bezos se ha erigido en un gigante del ecommerce como consecuencia de la consecución de unas infraestructuras logísticas (principalmente almacenes situados a las afueras de las grandes ciudades) que nada tienen que ver a las que disponía otro tipo de empresas como El Corte Inglés o Mercadona. Ahora, Amazon es capaz de realizar entregas en un periodo que no excede de la media hora según hemos podido saber gracias a un artículo publicado en el diario El Confidencial.
Si le preguntáramos la clave de ese éxito a Jeff Bezos, probablemente nos diría cómo funcionan los drones digitales que está empleando su compañía para la realización de esas entregas. No cabe duda de que la apuesta por esos sistemas digitales es lo que está explicando el enorme éxito que está cosechando esa compañía. Pero Bezos probablemente nos contaría también muchas cosas relativas a los almacenes en los que se preparan todos los pedidos de las empresas y que también cuentan con potentes sistemas digitales.
Disponer de un almacén en una ubicación privilegiada es hoy una labor indispensable para entregar pedidos a domicilio en un tiempo reducido. Pero los profesionales de Stock Alpha no creen que esa sea la principal baza para el éxito en un negocio. Lo que consideran fundamental estos profesionales es que esos almacenes cuenten con sistemas digitales de última generación y que permitan que el trabajo en esos almacenes sea eficaz y eficiente. Apostar por la última tecnología es imprescindible y, sin ella, un elemento como la ubicación pierde importancia.
El futuro gira en torno a ese comercio electrónico del que venimos hablando tanto en los últimos meses. Todos estamos condicionados, de una manera o de otra, por esto. La mayoría de la gente ya se dedica a comprar por Internet todo aquello que le hace falta. Acudir a una tienda o a una gran superficie parece tener los días contados. Y la verdad es que esto va a transformar, más si cabe todavía, nuestra manera de trabajar y de gestionar nuestros negocios. Hay que estar preparados para eso.